El Roque y El Altillo, barrios costeros que saben a mar
Si te dijéramos que existe un pueblo en el norte de Gran Canaria en el que solo las olas, que irrumpen con fuerza, perturban el silencio de sus calles.
Un lugar en el que tus labios saben a mar y en el que la marea juega al despiste. Si te confesáramos que cada puesta de sol es todo un espectáculo y que la brisa que se respira te transporta directamente a las tardes de verano.